AUTORETRATO DE LUZ Y SOMBRA (Ts2)
Por la noche, me senté frente a un pequeño espejo, giré la luz del escritorio para que se marcaran fuertes diferencias de luz y sombra en mi cara y comencé a marcar las zonas oscuras con el mismo carboncillo grueso que utilicé para el primer ejercicio.
Tras 15 minutos, este era el resultado,
Me cuesta mucho soltar los trabajos y al final le metí 5 minutos más para oscurecer más algunas zonas y definir. Fue un poco un error, quiero aprender a liberarme un poco más y a hacer dibujos más experimentales y difusos, con menos línea. Probablemente haga más pruebas de este ejercicio que iré subiendo.
AUTORRETRATO DE LÍNEA CONTÍNUA (Ts3)
Una semana más tarde realicé otro retrato mucho más suelto y despreocupado sin pensar en mi imagen sino en las sombras y formas que se generaban en mi cara.
Aún así aun creo que debo distanciarme más y lanzarme.
RETRATOS EXPERIMENTALES (Ts5)
Esta vez, se volvió a los retratos, pero dibujando con dos lápices a la vez pegados el uno al otro y con un carácter mucho más experimental. Dibujé 2 veces a 2 amigos distintos en 5 minutos cada retrato y estos fueron los resultados:
AUTORETRATO TOPOGRÁFICO (Ts8)
Tras la salida a La Pedriza, realizar un gran número de representaciones topográficas del paisaje y dibujar nuestro recuerdo de la sierra con los ojos cerrados, Susana nos propuso dibujar topografías de nuestros rostros también con los ojos cerrados:
No estoy contenta del todo con los resultados, el miedo que tenía de "no hacer un buen dibujo" al tener los ojos cerrados, no me permitió dejarme llevar. en condiciones Aun queda mucho camino para desprenderme de lo que se me ha inculcado, esa mirada preciosista, obsesionada con el resultado final.
Después, hice un retrato a mi compañero Pedro, debíamos leer el relieve del rostro de nuestro compañero con una mirada háptica, rozandole con la visión.
realicé un boceto y luego lo pasé a un 100x70
El resultado parece más cartoon que topográfico, pero siento que en el proceso de este retrato me dejé llevar mucho más tras haber reflexionado sobre el dejarme llevar y el evitar ese perfeccionismo que tanto corta la espontaneidad que requieren estos trazos.